Anaconda hambrienta

Iban dos hombres caminando en la selva y de pronto una anaconda gigante se come a uno,...

y el otro le dice:
¡No se preocupe no es venenosa!

Compartir este  Chiste con tus amigos

1 de Julio, 2008
11509 visitas
anaconda, serpiente, hambre, comer

Comentarios

Valoración

7.16 / 10
6 voto/s
Valorar