Despues del gusto viene el susto!
Después de una larga y tendida sesión amorosa, el joven se da la vuelta, saca un cigarrillo de sus jeans y busca su encendedor. Como no lo encuentra, le pregunta a su compañera si tiene uno a la mano.
-Debe haber algunos fósforos en el cajón del velador.
Él abre el cajón y encuentra la cajita de fósforos... al lado de la foto de un hombre. Naturalmente, el joven se preocupa.
-¿Es tu esposo? -pregunta él, nervioso.
-No, tontito, responde ella acurrucándose amorosamente.
-Tu enamorado, ¿entonces?.....
-No, para nada -dice ella mordisqueándole la oreja-.
-Bueno, ¿quién es él, entonces? -pregunta el desconcertado muchacho.
Serenamente, la chica responde:
-Soy yo antes de la operación.
-Debe haber algunos fósforos en el cajón del velador.
Él abre el cajón y encuentra la cajita de fósforos... al lado de la foto de un hombre. Naturalmente, el joven se preocupa.
-¿Es tu esposo? -pregunta él, nervioso.
-No, tontito, responde ella acurrucándose amorosamente.
-Tu enamorado, ¿entonces?.....
-No, para nada -dice ella mordisqueándole la oreja-.
-Bueno, ¿quién es él, entonces? -pregunta el desconcertado muchacho.
Serenamente, la chica responde:
-Soy yo antes de la operación.
5 de Noviembre, 2008
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